Turismo, Viajes y Fotografía... Tras un viaje a la Península de Yucatan, México, surgió la idea de hacer un blog para compartir experiencias. Aunque incluiremos un poco de todo, el blog contendrá principalmente fotografía, turismo y consejos sobre viajes. Somos dos hermanos, Diegosax y Chico Sánchez . El primero, músico y profesor de educación musical y fotógrafo aficionado, el segundo fotógrafo independiente residente en México.

Los Tres Deseos de Alejandro Magno

Quiero compartir una historia atribuida a Alejandro Magno que encontré en el sitio www.erroreshistoricos.com.  El objeto con que lo hago es para compartir algo que me llamó la atención. Después de leer este impresionante texto leí los comentarios de los visitantes del sitio. Me resultó increible ver que muchas personas no estaban asombradas con la sabiduría del texto sino que la discusión se centraba en si el texto era auténtico, si Alejandro era su autor o no. Lo cierto es que así está organizada la sociedad y también así son muchos de nuestros intelectuales, profesores y científicos hoy día, centran su energía en discutir sobre datos, fechas, estadísticas, números, nombres, etc. Por esto, la sociedad se pierde en los datos y olvida la esencia de la vida que es aprender y compartir experiencias, una esencia que no se puede medir ni calcular.

Para mí el texto da igual quién lo escribiera o no, si tiene faltas de ortografía o no, si se puede comprobar su autenticidad histórica o no, si lo escribió Alejandro Magno o no, su contenido es sabio y eso es lo que debería valorarse.Te invito a leerlo si no lo conoces ya:

Encontrándose al borde de la muerte, Alejandro convocó a sus generales y les comunicó sus tres últimos deseos. El primero fue que su ataúd fuese llevado en hombros y transportado por los propios médicos de la época, el segundo que los tesoros que había conquistado (plata, oro, piedras preciosas...), fueran esparcidos por el camino hasta su tumba, y el tercero que sus manos quedaran balanceándose en el aire, fuera del ataúd, y a la vista de todos. 
Uno de sus generales, asombrado por tan insólitos deseos, le preguntó a Alejandro cuáles eran sus razones. Alejandro contestó al general. Primero quiero que los más eminentes médicos carguen mi ataúd para así mostrar que ellos no tienen, ante la muerte, el poder de curar. Segundo quiero que el suelo sea cubierto por mis tesoros para que todos puedan ver que los bienes materiales aquí conquistados, aquí permanecen. Y tercero, quiero que mis manos se balanceen al viento, para que las personas puedan ver que vinimos con las manos vacías, y con las manos vacías partimos.
Alejandro Magno en su lecho de muerte en un cuadro pintado por Karl von Piloty